Cuando una empresa está organizada como una corporación, es propiedad total de sus accionistas, y es común que las corporaciones compartan las ganancias directamente con esos accionistas mediante el pago de dividendos. Aunque la mayoría de los dividendos se pagan en efectivo, una empresa también puede pagarlos en forma de acciones adicionales. La contabilización de cada tipo de dividendo es similar, pero el efecto final es diferente.
Proceso de dos pasos
La distribución de dividendos, ya sea en efectivo o en acciones, es un proceso de dos pasos. El primer paso es declarar el dividendo: la empresa anuncia que distribuirá el dividendo en una fecha específica y revela cuál será el valor total del dividendo. Al dividir el valor por la cantidad de acciones en circulación, puede determinar cuánto recibirá cada accionista. El segundo paso es pagar los dividendos.
Declaración del dividendo
Cuando una empresa declara cualquier tipo de dividendo, inmediatamente reduce la cuenta de ganancias retenidas en la sección de capital contable de su balance general por el valor total del dividendo. Las ganancias retenidas son simplemente ganancias acumuladas; dado que el dividendo es una distribución de ganancias, el valor del dividendo proviene de las ganancias retenidas. Luego, la compañía crea un pasivo en su balance general, generalmente llamado "dividendos a pagar" por dividendos en efectivo o "dividendos distribuibles" por acciones, que es igual al valor del próximo dividendo. En este punto, el balance general permanece en equilibrio, porque el monto total de capital y pasivos no ha cambiado.
Pagar un dividendo en efectivo
Cuando llega la fecha de pago de un dividendo en efectivo, la empresa paga el dividendo directamente con sus reservas de efectivo. Dado que la obligación de la empresa ya se ha cumplido, elimina el pasivo por pagar de dividendos del balance. Los activos de la compañía, específicamente sus reservas de efectivo, han disminuido en la misma cantidad que su patrimonio y pasivos combinados, por lo que el balance general está equilibrado.
Distribución de un dividendo en acciones
Cuando llega el momento de distribuir un dividendo en acciones, la empresa emite nuevas acciones a sus accionistas. Cumplida con su obligación, la empresa elimina el pasivo de "dividendos distribuibles". Luego aumenta el saldo de la cuenta de "capital aportado" o "capital pagado" en la sección de capital por el valor del dividendo. Una vez más, el valor total combinado de los pasivos y el patrimonio no ha cambiado, por lo que el balance general está equilibrado.
La gran diferencia
Si realiza un seguimiento del proceso de pago de dividendos en efectivo frente a la emisión de dividendos en acciones, puede ver dónde radica la gran diferencia. Con un dividendo en efectivo, el valor realmente abandona la empresa: el efectivo se paga a los accionistas, que pueden hacer lo que quieran con él. Ambos lados del balance terminan siendo "más pequeños" de lo que eran antes de que se declarara el dividendo.
Con un dividendo en acciones, por el contrario, la empresa simplemente ha cambiado el valor de una forma de capital social a otra. El valor que se había mantenido en las ganancias retenidas (ganancias que la empresa conservaba en nombre de sus accionistas) ahora está en manos de los propios accionistas en forma de más acciones de la empresa. La cantidad total de capital no ha cambiado, por lo que cada lado del balance general tiene el mismo tamaño que antes.