Las organizaciones pueden ser buenas en proyectos tácticos, como mudarse a un nuevo edificio o presentar un nuevo producto. Estos son proyectos que tienen un objetivo operativo, que probablemente no implique contribuciones de la mayoría de los empleados dentro de la organización. En estos proyectos, cumplir un objetivo táctico a tiempo y dentro del presupuesto son consideraciones clave. Un proyecto estratégico, por otro lado, tiene el objetivo principal de obtener una ventaja competitiva al enfocarse en la dirección general de la organización.
Análisis
Los proyectos estratégicos están diseñados para cumplir con uno o más objetivos estratégicos. Estos pueden incluir la compra de nuevas empresas para cumplir con los objetivos de ventas en el futuro. El objetivo de estos proyectos es proporcionar la hoja de ruta a la pregunta: "¿Dónde queremos estar dentro de cinco años?" Este tipo de proyectos pueden provenir de un tipo de análisis FODA, o Fortalezas-Debilidades-Oportunidades-Amenazas, donde una organización tiene que determinar dónde se encuentra actualmente en comparación con donde cree que debería estar.
Amplitud
Un proyecto estratégico, que implica la mayor parte de la fuerza laboral, puede imponer la necesidad de reentrenamiento, y es posible que los procesos deban rediseñarse para mantener los estándares de las operaciones a un alto nivel. Los ejemplos incluyen revisiones importantes de sistemas, consolidaciones de empresas operativas o la compra o escisión de unidades de negocio.
Proceso
Los proyectos estratégicos deben tener un alcance amplio y abordar objetivos estratégicos específicos que se definirán como tales en comparación con un proyecto táctico. Desde una perspectiva práctica, para que un proyecto estratégico sea exitoso, debe contar con el apoyo del equipo de dirección ejecutiva, quien no solo brindará apoyo sino que también articulará la visión a los involucrados en el proyecto. El cambio suele ser difícil para los empleados, y es importante generar entusiasmo y apoyo para el proyecto expresando de manera convincente la visión de lo buenas que serán las cosas para todos los involucrados.
Táctica
Los objetivos tácticos coexisten dentro del proyecto estratégico y deben completarse a tiempo y dentro del presupuesto. Por ejemplo, para comprar una nueva empresa, se deben preparar documentos legales, se debe notificar a los proveedores y clientes y se deben crear procesos comerciales. Estos objetivos tácticos se crean cuando los equipos determinan formas de lograr el objetivo estratégico.