Las asociaciones estratégicas son relaciones mutuamente beneficiosas entre dos empresas. Así como las grandes corporaciones pueden asociarse, dos pequeñas empresas pueden asociarse entre sí. Una pequeña empresa también puede asociarse con una empresa más grande. En cualquier caso, las empresas siempre deben firmar un contrato legalmente vinculante que describa sus responsabilidades y participación financiera en la asociación. Para forjar una asociación estratégica eficaz, una empresa debe investigar a fondo a sus socios potenciales. La empresa debe consultar con personas que hayan trabajado con el socio potencial, como dice Lisa H. Buksbaum en "Elección de socios estratégicos que realmente se asocian".
Compartir activos
Los activos que cada empresa aporta a la asociación estratégica pueden ser tangibles o intangibles. El prestigio de una empresa puede beneficiar a la otra, por ejemplo. Las empresas también pueden aportar recursos como finanzas, experiencia, infraestructura, mano de obra y equipo. Además, pueden compartir su acceso a los mercados. Las empresas ubicadas en diferentes regiones del mundo a veces se unen en una asociación estratégica global que permite a cada empresa llegar a un nuevo mercado. Al compartir sus activos, las empresas pueden aumentar sus capacidades, ahorrar dinero y ampliar su base de mercado.
Designación de responsabilidades
Para que una asociación estratégica funcione de manera eficaz, las contribuciones de cada parte deben estar claramente establecidas en un contrato escrito. "Uso de la imagen de la empresa X" no especifica exactamente cómo se utilizará la imagen de esa empresa. "Distribución del producto de la Compañía Y por la Compañía X" y "Uso de la marca comercial de la Compañía X" son más específicos.
Estructura legal
Las partes de una asociación estratégica pueden optar por crear una entidad separada de la que comparten la propiedad. Esta entidad se denomina negocio conjunto de capital. Las partes deciden qué porcentaje de la empresa poseen cada una. Por lo general, firman un memorando de entendimiento y un acuerdo de empresa conjunta que describe el papel y la participación de cada parte en la empresa conjunta. El acuerdo de empresa conjunta, un contrato legal, es particularmente importante porque tiende a tener más influencia legal. Si las partes no crean una empresa de capital conjunto, su acuerdo generalmente tiene un marco de tiempo más limitado, pero aún así debe describirse a través de un contrato legal. Su acuerdo también podría delinear el marco de tiempo de su asociación.
Complejidades
Las complejidades de las asociaciones estratégicas pueden volverse bastante complejas. Puede surgir un debate sobre qué parte es propietaria de la propiedad intelectual, por ejemplo, a menos que los contratos especifiquen claramente dichos acuerdos. Las negociaciones y la adaptación también son aspectos inevitables del trabajo en una asociación estratégica, como Jean W. Ross, et al. decir en "Arquitectura empresarial como estrategia". Cada empresa tiene como objetivo mejorar sus prácticas y su nivel de éxito a través de la asociación, y el entorno empresarial puede cambiar a medida que las empresas comparten recursos.