Grandes empresas vs. Pequeños negocios

Las pequeñas empresas impulsan el crecimiento económico en los Estados Unidos. Según un informe de mayo de 2011 del Consejo de Asesores Económicos, las pequeñas empresas fueron responsables de crear más del 60 por ciento de los nuevos empleos en los Estados Unidos durante los 15 años anteriores. Crean más que empleos. Las pequeñas empresas crean oportunidades para que las personas desarrollen seguridad financiera para sí mismos y para la próxima generación de sus familias.

Influencia del mercado

El tamaño en sí mismo puede ser una ventaja para las grandes empresas. Por ejemplo, un gran minorista que compra grandes cantidades de productos a los proveedores puede exigir mejores condiciones que una pequeña empresa que compra unas pocas unidades a la vez. Las pequeñas empresas pueden encontrar formas de obtener algunos de los beneficios de las economías de escala, como mediante la compra de un seguro médico a través de su cámara de comercio, que tiene el poder adquisitivo de un grupo grande y transfiere los ahorros a los miembros. Las pequeñas empresas a menudo descubren que no tienen el mismo acceso al capital que necesitan. Las grandes empresas pueden obtener financiación bancaria en condiciones favorables, mientras que las pequeñas empresas a menudo deben recurrir a personas adineradas (inversores ángeles) para obtener financiación de capital relativamente cara.

Innovación

El tamaño puede ser una desventaja cuando se trata de innovación: proponer y comercializar nuevas ideas. Las pequeñas empresas son ágiles. El propietario puede tomar decisiones rápidas en lugar de tener que maniobrar a través de capas de burocracia para proceder con una idea. Las pequeñas empresas están más cerca de sus clientes. El propietario de una pequeña empresa puede interactuar con los clientes a diario, brindando oportunidades continuas para descubrir la mejor manera de satisfacer las necesidades y expectativas de los clientes.

Ambiente de trabajo

Las grandes empresas tienen políticas y procedimientos bien definidos. Las grandes empresas también tienen una cultura corporativa: los valores, las normas de comportamiento y los estándares sobre cómo se espera que los miembros de la organización interactúen entre sí. Las personas que se incorporan a una gran empresa deben encajar en la cultura corporativa y hacer frente a las políticas vigentes. En una empresa pequeña, el propietario, que suele ser el fundador, muchas veces tiene que definir todas las políticas y marcar el tono de la cultura de la empresa. Para muchos propietarios de pequeñas empresas, este es uno de los aspectos atractivos de ser propietario de una empresa: poder establecer las reglas en lugar de seguir las establecidas por otros.

Riesgo y recompensa

Si el propietario de una pequeña empresa puede expandir rápidamente su negocio, medido por los ingresos y la participación del mercado en el que opera, tiene la oportunidad de obtener una recompensa sustancial cuando finalmente venda el negocio. Esta recompensa potencial conlleva un riesgo considerable porque las pequeñas empresas a veces fracasan o crecen tan lentamente que la empresa no se puede vender por una cantidad sustancial. El propietario de una pequeña empresa disfruta de una seguridad laboral total, suponiendo que la empresa sobreviva, mientras que los empleados de las grandes corporaciones siempre se enfrentan al riesgo de ser despedidos durante tiempos económicos difíciles.

Liquidez

La propiedad en una pequeña empresa no es una inversión líquida. Al igual que el propietario de una casa que vende una casa, el propietario de una pequeña empresa debe encontrar un comprador para su participación en la propiedad de la empresa para poder sacar su dinero. El proceso de venta de una empresa puede llevar muchos meses, si es que se puede encontrar un comprador. Los gerentes de grandes empresas públicas que poseen acciones en el negocio pueden vender sus acciones rápidamente en las bolsas de valores públicas.