Cómo trabajar con negatividad

Un empleado negativo puede cambiar rápidamente todo el estado de ánimo de su fuerza laboral. Cuando una persona muestra constantemente una actitud negativa, su comportamiento puede tener implicaciones de gran alcance. Un lugar de trabajo positivo es productivo y ayuda a promover la positividad en las ideas y la actitud. Un lugar de trabajo negativo suele mostrar baja productividad, disminución de la moral de los empleados y menores tasas de retención de empleados. Es necesario detener la negatividad en el lugar de trabajo antes de que se permita que se extienda y cause estragos en su empresa.

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Establece una cultura laboral positiva. El jefe o supervisor es el jugador más importante en la fuerza laboral. Si tienen una actitud positiva, una buena perspectiva y una naturaleza divertida, el resto de la fuerza laboral generalmente seguirá su ejemplo. Asegúrese de que su comportamiento sea lo más positivo posible y busque lo bueno en cada situación.

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Haga que el trabajo sea divertido y agradable. Es difícil ser negativo en un ambiente divertido, relajado y agradable. Incluso cuando los plazos son apremiantes, es bueno relajar a sus empleados con un almuerzo gratis inesperado o un breve ejercicio divertido durante el día. Cuando note que los empleados muestran actitudes negativas, interrumpa el ciclo con algo divertido.

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Aparta a los empleados negativos en privado. Hágales saber que no quiere actitudes negativas en su lugar de trabajo. Pregúnteles si algo está sucediendo en sus vidas que está creando su actitud negativa. Pídales que cambien su comportamiento y se concentren más en lo positivo.

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Aprecia a tus empleados. Muy a menudo, las actitudes negativas están presentes en un lugar de trabajo debido a la sensación de no ser apreciado. Agradezca a sus empleados con regularidad y hágales saber que aprecia sus contribuciones a su empresa y que el trabajo que hacen por usted es apreciado.

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Ofrezca coaching y asesoramiento a sus empleados. Algunas personas son naturalmente más negativas que otras, y es posible que ni siquiera se den cuenta de que lo son. Contrate a un consultor para que venga un día y hable sobre los beneficios de las actitudes positivas. Haga que la asistencia sea obligatoria y anime a los empleados a implementar lo que han aprendido. También puede considerar la posibilidad de establecer servicios de asesoramiento para empleados que puedan estar pasando por dificultades en sus vidas externas.