Tres niveles de estándares éticos en una organización empresarial

Los estándares éticos de una empresa son un factor clave en cómo se define esa empresa. La reputación de una empresa afecta a sus clientes, empleados, potencial de crecimiento y éxito general. Una organización empresarial que ejemplifica la integridad en sus productos, servicios y acciones se rige por altos estándares éticos en los tres niveles.

Bufetes de

Estados Unidos es una sociedad sujeta a leyes. Estas leyes definen la diferencia entre el bien y el mal, y lo que la mayoría de las personas considera un comportamiento aceptable. Una organización empresarial debe cumplir con estas leyes para mantener sus estándares éticos. Las leyes de salarios y horas que protegen a los empleados son un ejemplo, mientras que las directrices que supervisan la protección del medio ambiente son otro. Las empresas deben cumplir con las leyes instituidas por el gobierno federal, el estado y la municipalidad local. Hay situaciones en las que las acciones de una organización empresarial son legales, pero pueden no ser particularmente éticas. Esta es una línea muy fina y la organización tiene la responsabilidad de autocontrolarse si quiere mantener un alto estándar ético.

Regulaciones

El segundo nivel de estándares éticos para una organización empresarial se refiere a sus políticas y procedimientos internos. La empresa los crea como una guía que deben seguir sus gerentes y empleados. Un conjunto de políticas claramente definidas y altamente éticas elimina las conjeturas de las decisiones que se toman a diario. Estas políticas deben incluir prácticas de contratación, procedimientos de despido, problemas de acoso sexual, relaciones con proveedores y límites de entrega de obsequios. Cuando los miembros del personal de una organización están capacitados en las políticas de la empresa, las acciones y reacciones se convierten en una segunda naturaleza. Asegurarse de que esas políticas sean éticamente sólidas elimina la posibilidad de acciones o decisiones inapropiadas.

Grupos Privados

Aunque una organización empresarial puede estar sujeta a las leyes y políticas internas aplicables, el cumplimiento de las personas determina la verdadera integridad de la empresa. Cuando un empleado se une a una organización empresarial, viene equipado con sus propios valores morales basados ​​en la herencia y la educación. Es responsabilidad de la organización empresarial fomentar un clima corporativo que respalde el comportamiento ético de todos los empleados. Esto se logra mediante la formación continua en las políticas y lineamientos éticos de la empresa, el refuerzo positivo de las acciones éticas y el liderazgo predicando con el ejemplo.

Consecuencias

Hay consecuencias notables para una organización empresarial cuando ignora o rompe los estándares éticos en cada nivel. Si una empresa no se adhiere a la ley, las ramificaciones pueden incluir multas, sanciones o incluso sentencias de cárcel para los propietarios de empresas. Las infracciones pueden incluir la contaminación del medio ambiente, la violación de las leyes laborales o la presentación de informes financieros fraudulentos.

Las infracciones a nivel de políticas de la empresa pueden resultar en la necesidad de auditorías internas, investigaciones legales y la institución de acciones correctivas. Sin duda, estas consecuencias tendrán un impacto financiero debido al tiempo y los costos involucrados, y también pueden afectar negativamente la moral de los empleados a medida que las operaciones comerciales se vean tensadas por la presión.

El incumplimiento de los estándares éticos a nivel individual puede ser el más costoso. Si las acciones dañan la reputación de la empresa, las consecuencias pueden incluir pérdida de clientes, rotación de empleados y daño a la lealtad del personal.